El agua está en Villa de Reyes

El agua está en Villa de Reyes

El agua potable se refleja en las miradas de los niños de primaria, cuando las primeras gotas caen desde un filtro. El vital líquido se dibuja también en las sonrisas de los profesores que vigilan a los alumnos y escuchan el discurso de los ejecutivos de la empresa alemana que fabrica automóviles. El agua viaja entre las palabras del maestro de ceremonias y se presenta victoriosa ante la mirada de los asistentes, festejando que Villa de Reyes tiene agua potable.

Junto con San Luis Potosí, Villa de Reyes es uno de los municipios reconocidos en la industria manufacturera por el alto valor agregado que genera. Aquí es donde diferentes compañías, como por ejemplo BMW, apostaron y no se equivocaron, porque hoy en día, la icónica marca de automóviles de lujo, tiene lo necesario para atender mercados nacionales e internacionales gracias a la estratégica posición geográfica de la población.

Frente a la gran promesa del desarrollo industrial, Villa de Reyes se está regenerando, reestructurando la distribución de servicios y recursos, porque está creciendo, y no puede faltar el más básico: el agua, que necesitarán en mayores cantidades para la cifra proyectada de 56,554 habitante para el año 2030.

La realidad deseada, se hace visible gota a gota, con el acuerdo en 2015 que suprime la veda decretada y publicada en el Diario Oficial en 1958, sobre el acuífero Jaral de Berrios-Villa de Reyes, que impedía construir una captación de agua del subsuelo para extraer con ella la cantidad de agua requerida.

Gota de agua

Llegar a este punto no ha sido fácil, la clase de suelo, las cantidades que requiere la agroindustria y el incremento de zonas habitacionales ha colocado en riesgo el suministro del vital líquido. Apenas en julio de 2019 la Comisión Estatal de Agua explicó que el pozo El Calvario, cumplió con su ciclo y se debería reestructurar la fuente de suministro para los hogares y la industria.

Si bien, el agua es uno de los bienes más básicos, no es tan sencillo llevarla a los hogares, sobre todo cuando el manto acuífero ha sido sobre explotado y no ha tenido la posibilidad de re-abastecerse por completo, y la lista no es corta, de acuerdo con datos de la Secretaría de Desarrollo Agrícola y Recursos Hidráulicos del Estado, en 2010 ya había 9 acuíferos sobreexplotados: Vanegas, Real de Catorce, Cedral, Matehuala, Villa de Arista, Villa Hidalgo, Salinas, Villa de Reyes y San Luis Potosí.

Diez años después, el resultado ya es otro, porque la suspensión de la veda exige otro orden y acuerdos en los que el recurso natural se administre de manera diferente, lo que impedirá la sobreexplotación del acuífero Jaral de Berrios-Villa de Reyes, que de acuerdo con Jesús Medina Salazar, director de la Comisión Estatal del Agua, las plantas industriales y los asentamientos habitacionales tendrán garantizado el abasto suficiente.

Existen muchos planes para crecer, para adaptarse generando más acuerdos, porque al final del camino, la industria pujante atrae más inversión, nuevas formas de comercio, y muchos consumidores que exigirán comodidades para vivir, y la realidad, tan seca como una tarde de verano, es que no se puede progresar sin agua.